"Lo que intento lograr con mi música y mis conciertos es que se materialice toda la magia del rock. La magia y la verdad están estrechamente vinculadas a la música. La música es auténtica magia. Cuando se utiliza incorrectamente se produce un envilecimiento de la música. Pero cuando funciona... bueno... es algo glorioso"
Rory Gallagher, 1981.
Así pensaba y sentía el guitarrista, cantante y compositor irlandés Rory Gallagher, uno de esos músicos denostados por la memoria general pero difícil de olvidar cuando te acercas a su música. Con la misma sencillez, integridad y belleza que habla en el párrafo superior tocaba en cada uno de sus conciertos.
Creador de temas intensos y desbocados, este hombre desprendía en el escenario naturalidad y energía a partes iguales y era esta sinceridad la que le llevaba a crear esa especie de comunión litúrgica entre música, público y artista.
Sin duda, todo un ejemplo de honestidad y amor por el Rock que escasea en los tiempos actuales.
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